GERMAN GALLEGOS CRUZ. Mesa De Las Nauyacas
PRI, CONTRA PRI…
Atento recado a Pepe Gómez, director general del grupo Quequi. El gran problema en este proceso electoral es que vamos contra uno de los nuestros.
No sería difícil si el adversario fuera un panista o perredista, comentó en una plática de banqueta un diputado priista del Congreso Local. Hay una serie de problemas que no debemos soslayar y que operan en contra. Por eso insisto que la elección para nuestro candidato Mauricio Góngora Escalante no será un día de paseo. Yo he participado en varios procesos electorales y ninguno como este, donde hay mucha inconformidad de la propia militancia y algunos liderazgos de mucho peso, sentenció mi amigo el legislador. Y siguió dando ejemplos de irregularidades. “Fíjate que el meollo de las inconformidades está en el reparto de las candidaturas. Ah, y no termina ahí, cuando se proponga la integración de los Cabildos habrá otra ola de inconformidades que socavan la fortaleza de nuestro partido. Muchas veces la arrogancia y la soberbia nos cega y creemos que sólo basta un buen candidato para ganar”. Mauricio sin duda es un “producto” que por si sólo se vende, pero en una elección tan competida eso no basta. “Hay que volver a convencer a todos los líderes de nuestro partido para ir en busca de todos los activistas desilusionados por la exclusión involuntaria. Y renovarles la esperanza. Yo no creo en todos los que dicen que están comprometidos con nuestro proyecto. Hay muchos que están pero ‘no están’ ¿Si me entiendes?” Preguntó. Para concluir con la visión que tengo. “Te diré que el hecho que Carlos Joaquín sea un reciente exmilitante del PRI le da un arsenal de recursos tácticos que sabrá cómo manejar a su favor en un momento dado. Además de la pésima estrategia de victimizarlo hasta con apodos indignos que la gente reprueba. En una contienda electoral seria de respeto al adversario, nosotros llevaríamos por mucho la delantera, pero desafortunadamente como en todo hay cabrones NP (nalgas prontas) que sin recibir orden atacan innecesariamente al contrario de sucia manera. Tú conoces a Mauricio y a Carlos y ninguno tiene perfil de pandillero, al contrario son dos hombres forjados en el trabajo permanente. Tengo la esperanza que una vez iniciada la campaña política legal, se acaben los golpes bajos. Porque aunque tú no lo creas este asunto de la política, es muy parecido al deporte burgués del golf, en estos dos casos, gana el que menos golpes da ¡Ay cabrón! Ya se me hizo tarde en la plática contigo, amigo German. Ya me voy, porque yo si estoy con Mauricio y tengo un chingo de tareas para fortalecer a mi candidato. Después paso y te platico del error que cometieron al darle la candidatura a Filiberto Martínez”. Se fue el diputado y me quede con la “mosca” en la oreja. Cuánta razón le asiste a este caballero.
CANDIDATOS TESTIMONIALES…
Saben que el pleito es entre dos. No se trata de menospreciar a tremendos luchadores sociales y excelentes ciudadanos, pero ¿Qué hacen en esta contienda electoral: Alejandro Alvarado Muro, que abandera al Partido del Trabajo, José Luis Pech Várguez, al partido Morena de Andrés Manuel López Obrador y el amigo Rogelio Márquez Valdivia, que ahora porta el estandarte de un mini partido llamado Encuentro Social?. Siempre que hay elecciones muy parejas surgen comentarios, hijos de la especulación ¿A qué candidato afectará la dispersión de votos? Cualquiera de los tres candidatos mencionados sabe perfectamente que ninguno de los tres tiene posibilidades de ganar la gubernatura del estado ¿Acaso a pesar de la personalidad seria y académica de cada uno, son proclives a contarse historia? ¿En la soledad de sus respectivos aposentos se verán en palacio de gobierno, despachando y marcando el paso de la historia estatal, para satisfacción de las generaciones venideras? Si estos tres caballeros creen hacerle un servicio a la democracia de México mucho por ellos si sólo juegan para estorbar, muy malo para ellos. Esta elección ha despertado el interés de muchos ciudadanos, creo que habrá muchos votos en las urnas. Esta circunstancia crispa los nervios, provoca insomnios y la incertidumbre es la compañera de almohada de los candidatos a los puestos en juego. Qué tiempos aquellos de mi infancia, donde solo había un solo candidato que peleaba contra el mismo, pero la victoria se aseguraba de antemano.
Llegó la apertura democrática, el gran negocio de hacer un partidito político y asegurar riqueza, tranza e impunidad. Hoy tenemos partidos políticos que no ganan elecciones, pero ganan mucho dinero, vía prerrogativas. Es el caso de los partidos que participan en los procesos electorales, solo para lograr el porcentaje requerido por ley, para mantener su registro y seguir extrayendo el dulce néctar del dinero fácil. Así seguirá nuestro aprendizaje sin pasar del estatus de imberbes hasta el final de los tiempos. Por lo pronto seguiremos con la ofensa, la calumnia, la descalificación del adversario, característica inequívoca de las democracias bananeras. Ah, y los candidatos de utilería (pequeños elementos que completan la escenografía), para estorbar o beneficiar, según sea el caso…
La frase: La mentira engaña solo al que la dice…Sophie d’Houdetot.
