Los choferes de las unidades de los diversos gremios transportistas hacen lo que quieren en el tramo Tulum-Playa del Carmen, aseguran los usuarios.

Latente el peligro por el exceso de velocidad  

 

TULUM. Los dos últimos aparatosos accidentes con saldo de seis personas lesionadas de gravedad, protagonizados por conductores de unidades de transporte público y  turístico, a decir de ciudadanos, no es más que la anarquía que prevalece en la Riviera Maya, concretamente en el tramo Tulum-Playa del Carmen, como uno de los puntos con mayor desequilibrio en el tránsito vehicular.

Ante tal situación, los tulumnenses exigieron a las autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes dar forma al sistema público de esta área, pues diariamente la mayoría de las personas  utilizan un servicio de transporte para llegar a sus trabajos en los diferentes hoteles o bien hasta Playa del Carmen; sin embargo, esta tarea diaria para ellos resulta un tanto peligrosa.

Los conductores de las unidades de transporte foráneo, ya sea de los sindicatos taxistas o de la Unión Nacional de Transportistas del Cambio (Untrac), “Tiburones del Caribe” y hasta de las empresas turísticas que ostentan placas federales, circulan a muy altas velocidades por el tramo carretero en mención, sin respetar los límites de velocidad establecidos para estas unidades, con lo que podrían causar graves accidentes, como los dos recientes.

El primero ocurrió por la alta velocidad y sobrecupo, al que se les abona el mal estado de las unidades y llantas desgastadas; en éste estuvo involucrada una van del transporte foráneo con placas 5522TRX, perteneciente a “Tiburones del Caribe”.

Otro de los hechos es el ocurrido el pasado lunes, en el que cuatro turistas extranjeros resultaron con lesiones de gravedad, tras una aparatosa volcadura a la altura del kilómetro 256+500, justo frente al hotel Villas Akumal, en el que se dice el conductor circulaba a más de 140 kilómetros por ahora,  lo que no le permitió maniobrar y volcó, tras el estallamiento de un neumático trasero del lado derecho.

De acuerdo con Luis Caamal Pech, pasajero frecuente de estas unidades, lo más lamentable es que cuando los usuarios piden a los conductores moderar la velocidad, no lo hacen y reaccionan de manera grosera y prepotente.

Por su parte, Juan Manuel Solís comentó que es importante que las autoridades pongan orden entre los conductores de las unidades de transporte público, “porque son groseros y además siempre andan echando carreritas para ganar el pasaje”.

Ambos entrevistados señalaron que la carretera federal que conduce hacia Playa del Carmen se ha convertido en un desorden vial, con riesgos de accidentes por la alta concentración de unidades de transporte colectivo, ya que la presencia de diferentes líneas o empresas generan un clima de lucha por el pasaje, lo que alienta el peligro. (Por Francisco Canul).

Comments

comments

No hay comentarios