Querían sacar los mototaxis; bloquean instalaciones de la Apiqroo y recuperan dueños sus unidades; denuncian despojo
Por Luis Roel Itzá
Quequi
Ante la desidia de regular el servicio de mototaxis en Cozumel, el problema que las autoridades hasta el momento no han querido sentarse a negociar con mototaxistas, ocasionó que el pasado fin de semana se diera un enfrentamiento entre mototaxistas y el Imoveqroo, cuando la autoridad quiso sacar de la isla los vehículos que estaban en el corralón de Tránsito Municipal.
Acción considerada ilegal por abogados ya que, si bien las unidades estaban en resguardo de la autoridad, el delito se cometió en jurisdicción de un municipio y los vehículos no podían ser sacados y mucho menos sin informar a los propietarios, ya que además la supuesta autoridad no entregó ninguna boleta ni documento oficial de infracción a los propietarios.
Al enterarse los mototaxistas que sus vehículos estaban a bordo de dos grúas a punto de salir en el cruce marítimo de carga, rápidamente bloquearon las instalaciones de la Administración Portuaria Integral de Quintana Roo (Apiqroo) y aunque personal de la Guardia Nacional y Marina acudieron para resguardar a las grúas, los más de 200 mototaxistas, familiares y usuarios decidieron bajar las grúas y recuperar sus vehículos, además de acudir a la Fiscalía General del Estado (FGE) para denunciar el intento de despojo por parte de la autoridad, abuso de autoridad, extra limitarse en sus funciones y lo que resulte.
Este enfrentamiento ocurre porque las autoridades no han querido permitir que los mototaxistas den el servicio por estar bajo presión de los taxistas que quieren seguir con el monopolio del servicio, aunque no atiendan a los cozumeleños y se enfoquen a los turistas.
Los mototaxistas han amenazado con que defenderán con uñas y dientes su patrimonio y ya no permitirán que saquen de circulación de las calles a su fuente de ingreso familiar, todo porque las autoridades no quieren regular el servicio de transporte público de mototaxis que demanda la ciudadanía ante el abandono de los taxistas.
