“El que no agradece, al diablo se parece”
Los proverbios antitéticos en la Biblia, son los dichos de las personas sabias. Su sabiduría obtenida se debía al tener en cuenta el consejo y el temor divino. En todos los tiempos y en todas las civilizaciones ha habido personas sabias y personas mentecatas, es clara la diferencia entre ellas. El contraste que muestra como son, como viven y como terminan, es lo que le da la calidad de “antitético”. En el libro de los Proverbios de Salomón los encontramos. Pero hoy día circulan por la calle muchos de nuestra contemporaneidad. He aquí algunos:
- Por más dulce que sea el amor, no te alimentará.
- De lejos, toda la gente es buena.
- No seas dulce, o te comerán. No seas amargo, o te escupirán.
- La ira y la locura son hermanas.
Los viejos poseen gran sabiduría, en el pueblo judío los viejos sabios estaban a la puerta de la ciudad para ser consultados, un consejo a tiempo era muy importante.
Proverbios 31 es un elogio a la mujer virtuosa, pero ella también tiene un marido que recibe consejo de los sabios: Su marido es conocido en las puertas, cuando se sienta con los ancianos de la tierra. Prov. 31:23.
Todo hombre puede ser rey, siempre y cuando reciba buenos consejos y trate a su esposa como una reina, a menos que sea el tipo de rey de la canción de José Alfredo Jiménez:
–Yo sé bien que estoy afuera… No tengo trono ni reina, ni nadie que me comprenda, pero sigo siendo el rey. Una piedra en el camino me enseñó que mi destino era rodar y rodar.
¡Pobre hombre! Estaba afuera, no tenía trono ni reina y se consideraba “rey”. Hasta la piedra con la que tropezó le dio una lección, la cual no aprendió.
En el sendero llamado vida, me he encontrado esos viejos sabios que han sido de mucho valor a mi vida, los tengo perfectamente claros en mi mente, sus consejos fueron valiosos, y cuando uno de ellos muere, es como si una biblioteca se hubiera quemado.
Desde el comienzo de la historia de Israel, los ancianos fueron líderes de diversas familias y tribus. Asumieron funciones importantes en el gobierno de la nación. Cuando la tarea de gobernar en Israel creció, parte de la carga fue transferida de Moisés a un concilio de 70 ancianos. Núm. 11:16-17. Durante el período de los jueces y de la monarquía, los ancianos tuvieron un lugar destacado en la vida política y judicial de Israel.
Ya en el nuevo testamento, referente a la iglesia, Pablo y Bernabé nombraron ancianos maduros en su fe para servir en las iglesias. Pablo se refirió a ellos como quienes supervisaban a la iglesia y servían en ella como pastores. Hechos. 20:28.
¡Valoremos a nuestros viejos! A propósito, ¿Qué lugar ocupan hoy en la iglesia?
¡Bendiciones amigos y hermanos del camino de Dios! SJ. Carlos César González Cruz
