Demandan frenar contaminación de la bahía
Por Mayra Cervera
CHETUMAL
La presencia de agentes contaminantes, principalmente provenientes de pesticidas, fertilizantes y materia fecal, ha generado una significativa afectación a la Bahía de Chetumal, que podría poner en riesgo la flora y fauna, así como limitar el uso recreativo que se le da de parte de la población.
El director de la unidad Chetumal del Colegio de la Frontera Sur, Héctor Hernández Arana, investigador de ecosistemas costeros, urgió a las autoridades de los tres niveles de Gobierno para tomar en cuenta la información y los estudios que han realizado, para llevar a cabo verdaderas acciones de protección.
En el escenario general de la bahía de Chetumal, en este momento llaman la atención el aumento de las zonas agrícolas que siguen vertiendo los lixiviados de sus fertilizantes y sus pesticidas hacia la bahía, comentó el investigador al citar los estudios realizados recientemente.
Consideró que las evidencias de contaminación son una fuerte llamada de atención a la necesidad de establecer procedimientos de regulación adecuados en la franja de las actividades económicas y de asentamientos humanos cercana al cuerpo de agua.
Explicó que no puede hablarse todavía de un problema o una amenaza de salud, sin embargo se han duplicado los lugares en donde las muestras indican la presencia de químicos contaminantes.
Además la presencia de coliformes fecales, en estos momentos tiene una elevación importante, debido a que la ciudad en un porcentaje mayor al 30% no cuenta con sistema de drenaje sanitario y aún vierte sus aguas negras en fosas sépticas tradiciones, que por el escurrimiento pluvial se lavan hacia la bahía.
Dijo que el arrastre de los sedimentos contaminantes agrícolas y los lixiviados de las fosas sépticas sin ninguna medida o acción que se los impida, están llegando al santuario del manatí, elevando los niveles de riesgo, y de no atenderse en el mediano plazo podría generar la limitación del uso de los balnearios que ahí existen.
Insistió en decir que a los tres niveles de gobierno se les provee información sobre los estudios y conclusiones respecto a la situación dela Bahía y cualquier otra zona bajo observación, sin embargo conocen muy poco de las decisiones que se hayan tomado para resolver los riesgos que suponen con esos estudios.
