Son limitadas las unidades que aceptan los boletos con descuentos a estudiantes, por lo que pasan horas en las paradas para poder trasladarse a sus hogares.

Transportarse es un tormento

 

 CANCÚN. Las limitadas alternativas que existen en Cancún para que estudiantes de escasos recursos puedan acceder al servicio de transporte público con boletos prepagados con 50% de descuento, obliga a numerosos alumnos de primaria hasta universidad, a esperar, a veces durante más de una hora, el paso de algún autobús que los lleve o los acerque lo más posible a sus hogares.

La problemática afecta a cientos de jóvenes que, pese a que varios casos cuentan con los respectivos boletos con descuento, los acuerdos firmados entre el Ayuntamiento de Benito Juárez y cuatro de las siete concesionarias del servicio, restringen su oportuna movilidad.

Esto es posible observarlo a la hora de la salida de sectores como el cruce de la avenida Tulum con Uxmal, en torno a la que existen dos escuelas secundarias y un bachillerato, y sobre la avenida López Portillo, donde estudiantes del Colegio de Bachilleres Plantel Uno, se aproximan a tomar el transporte que los lleva a sus hogares.

Precisamente en este último lugar, pese a ser una vía principal por donde circulan numerosas unidades de transporte colectivo, con dirección a fraccionamientos y colonias del norte, sur y poniente de la ciudad, los jóvenes deben ser “selectivos” para abordar la unidad que los conducirá a su destino.

A decir de un grupo de tres estudiantes del cuarto semestre de bachillerato, que esperaban el paso de su ruta de camión para poder hacer válidos sus boletos que adquirieron a cuatro pesos por pasaje, en un módulo localizado en el Palacio Municipal, es necesario esperar hasta que pase un autobús que se los acepte.

Aunque los tres viven por el rumbo de la colonia irregular Cuna Maya, hacia donde llegan varias rutas de combis de Transportes La Franja y Transporte Terrestre Estatal (TTE), se ven en la necesidad de esperar a que pase alguno de los dos o tres microbuses que la empresa Maya Caribe tiene para dicho derrotero, lo cual puede tomar hasta más de una hora de espera.

“Cuando vemos que no pasa el camión de Cuna Maya, tomamos el que nos deja en Paseos del Mar y caminamos como seis cuadras. Es eso o pagar 8 pesos a la combi”, afirmaron.

Es evidente que en proporción, las combis y minivan que cada vez van superando en número a los autobuses de Autocar, Maya Caribe y Turicun, y que no tiene suscritos acuerdos para ofrecer descuentos a los estudiantes, contribuyen a las dificultades que estos enfrentan para trasladarse a sus casas y escuelas, pues gastarían más dinero del que disponen. (Por Raimon Rosado)

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